Traducciones del Blog

miércoles, 26 de agosto de 2009

El inestable Rey David

DEPORTES


David Nalbandián es sin duda un personaje muy particular, que desorienta al común de la gente que sigue el desempeño de la denominada "Legión argentina" que deambula por los courts del mundo según el calendario internacional de tenis.

El rubio cordobés oriundo de Unquillo, es un jugador diferente por donde se lo mire. Tal vez por eso, así como podría ser Juan Román Riquelme en el fútbol, despierta amores y odios para los amantes del deporte blanco.

Posiblemente dotado por un talento que descubrió por casualidad, David hacía sus primeros pasos en el Circuito Profesional Juvenil con resultados sumamente destacados. El entrenamiento y el empeño que puso cuando era aún un jóven y todo lo que tuvo que dejar de lado en su momento empezó a dar su fruto.

Señalado por glorias de nuestro tenis como Guillermo Vilas y Javier Frana (quien lo sigue con su relato por ESPN) como el jugador más completo de la "Legión" y con la mentalidad más capacitada para llegar al primer puesto del ranking.

Esa obseción que se presenta como cuenta pendiente para el tenis argentino por ubicar la celeste y blanca en lo más alto de la clasificación. Esta necesidad que señaló con el dedo en su momento a Mariano Puerta, Guillermo Coria y tanto otros para ocupar ese lugar pero que quedaron truncas ya que no pudieron soportar la carga.

O contrariamente a seguir el manual de otros tenistas como Roger Federer, que hoy vemos que no es infranqueable, el cordobés disfruta de su trabajo.

Nalbandián hace oídos sordos a ese destino. Un tanto excedido de peso para algunos, que le falta ser más profesional, para otros, él se mantiene en la elite desde hace más de cinco años. El desafío ahora se lo pasa a Del Potro, del que alguna vez dijo: "Ahora el número uno del país es Juan Martín - Del Potro - y él tiene la responsabilidad de hacernos quedar bien".

Sin duda el revés paralelo más preciso del circuito. Revés con el que también devuelve la presión que le tiran. "Es sobervio", sentencia algún hincha y el cordobés devuelve gritando un punto ganado en la Copa Davis, en la que tiene casi asistencia perfecta.

Así como mantiene desde hace tiempo un nivel de top ten, mayor es su exposición y las críticas hacia su figura. Sofía Zamolo, Victoria Vanucci y el travesti Pequeña P, son sólo algunos de los nombres que se le adjudicaron como romances. Controvertido. Pero él no se detiene.

Se abstrae divirtiendose con su posible verdadera pasión: los autos. Hasta se dio el lujo de armar su propio equipo de Rally. Y de igual manera nos puede sorprender tirándose en Bungie Jumping de 200 mts en Nueva Zelanda. Así es el Rey David. ¿Acaso alguno le puede criticar algo?

Para algunos hace abuso de lo que tiene y compensa el tiempo pasado de estricto entrenamiento. Pero el tenis es en primer lugar un deporte individual y él se lo ganó con su propio sacrificio. Y tal vez sea ese el secreto: Recordarlo diariamente.

Y más allá de todo, el público que lo adora es el que primero en criticarlo porque siente que es suyo y como quien quiere a un pariente piensan que puede ser mejor, sin entender que él es así.

Es por eso que al Rey David es probable que no lo entendamos pero el día de mañana gana un torneo y nuevamente todos lo queremos.

Nota relacionada:


No hay comentarios:

Publicar un comentario